Viña Korta: Un día visitando el valle de Curicó

Hace rato que Curicó dejó de ser una ciudad sólo de paso o una parada de carretera para disfrutar de su gastronomía. Hoy, esta ciudad que está sólo a dos horqas de Santiago, tiene varios atractivos con nombre propio, que se están haciendo notar. Uno de ellos, el enoturismo. Y en esto, la viña Korta es una de las pioneras en mostrar su tradición, y sobretodo sus productos. Y en este post les cuento todo lo que se puede hacer en ella.

Pero primero, les cuento algunas cositas sobre la ciudad de Curicó, el centro neurálgico del valle del mismo nombre. He ido tantas veces a la ciudad en mi vida, que por mucho tiempo creí conocerlo todo. De niña recuerdo muchísimos paseos por su plaza, la más bonita de Chile, a la sombra de alguno de sus grandes árboles, tomando helado o simplemente mirando los cisnes (sí, ¡había cisnes! hace muchos años eso sí) que se paseaban por las glorietas de la plaza. También me acuerdo de sus interminables campos, camino hacia las playas de arena oscura y vientos que dejaban todo impregnado con olor a mar.

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Hace unas semanas tuve la oportunidad de conocer Viña Korta, en el valle de Curicó. Este valle es uno de los más grandes productores de vino de Chile, que se está abriendo al turismo con gran entusiasmo y un montón de tradiciones y paisajes por descubrir. De hecho, el valle a su vez está compuesto por otros más pequeños, cada uno con su especialidad y su encanto.

¡Pero vamos por parte! Primero, te cuento aquí cómo llegar a esta zona.

Como marzo y abril son los mejores meses para conocer los valles viñateros de Chile, aquí en este post les cuento todos los detalles de las fiestas de la vendimia Chile 2020.

CÓMO LLEGAR A SAGRADA FAMILIA, EN EL CORAZÓN VIÑATERO DE CURICÓ

Una de los mejores atributos del valle de Curicó es que está cerca de Santiago y de varias otras ciudades. Es una perfecta escapada de fin de semana y por el día, también, porque está sólo a dos horas, en auto y un poquito más, en bus. Ahora les cuento cómo llegar acá:

• Por bus: Buses de las compañías Tur Bus, Andimar y otras, hacen varios viajes en el día hasta el Terminal de Curicó. Los precios están en el rango entre $3.500 y $5.500, dependiendo de la compañía. El viaje dura unas 2,5 a 3 horas, también dependiendo de la compañía y si el trayecto es directo o no.
• Por tren: Curicó también puede conocerse vía tren, con el Terra Sur. Dos horas desde Santiago, en un cómodo carro y con asientos cuyo precio van desde los $7.900 si los compras con anticipación.
• En vehículo: Curicó está a 200 kilómetros por la Ruta 5 Sur desde Santiago, tomando unas 2 horas de viaje o un poquito menos.

Aquí te dejo dos links útiles para comprar pasajes para tu viaje a Curicó y alrededores: para bus, haz click aquí, y para tren, aquí podrás comprar.

Para llegar a Sagrada Familia hay dos opciones: seguir en vehículo, claramente, llegando en 30 minutos desde Curicó -está a 20 Km- o tomando cualquier bus en dirección a esta localidad, desde el Terminal de Buses de Curicó.

Precisamente, la viña Korta está en el valle de Sagrada Familia, apenas unos kilómetros hacia el poniente de esta localidad. Llegando aquí ya te encontrarás con todo el campo que lo rodea:

CONOCIENDO LA VIÑA KORTA

La viña Korta está emplazada en una preciosa casa colonial, que tiene varias historias que contar, y que perfectamente podría ser un museo. Cuando llegas te recibirá esta preciosa recepción, que ya anuncia lo que se viene: conocer más de las tradiciones y la gastronomía de la región.

Viña Korta es una viña de propiedad de una familia tradicional del valle de Curicó, de origen vasco, desde donde se origina su nombre. Se emplaza en el antiguo fundo de Santa Ana de Peteroa, en un valle ancho, entre montañas costeras, que hace que el viento que viene desde el mar se cuele entre sus vides. Y eso, por supuesto, le da un carácter especial a sus vinos.

El tour por viña Korta parte desde su planta de producción, y aquí es donde aparece la primera diferencia con otras viñas: si bien los procesos productivos son parecidos, en la viña te los mostrarán desde otra perspectiva: desde arriba. Después de entender los tipos de uvas, pasarás hacia este mirador. Desde aquí se ve toda la viña y los cerros que la rodean:

Y desde aquí también conocerán la sala de guarda, que desde arriba se ve en todo su esplendor.

LA CASONA DE SANTA ANA DE PETEROA, LA JOYA DE VIÑA KORTA

Después de dar un paseo por el sector productivo de viña Korta, ahora nos vamos a lo tradicional: su casona, que ha sido reconstruida y rehabilitada especialmente para recibir a los visitantes de la viña. Recordando que esta fue una de las zonas más afectadas por el terremoto de 2010, es muy reconfortante ver este espacio tan bien cuidado y rehabilitado.

Lo especial de esta casona, además de su colección de muebles, que nos transporta directo hacia 100 años atrás, es donde está ubicada. De un momento a otro, cuando me lo explicaron en la viña, relacioné el nombre del fundo con la historia del Chile central: la batalla de Peteroa, por allá en el siglo XVI. Cuando los españoles recién estaban llegando a Chile, tomó lugar muy cerca de donde hoy está la viña. Esta es la conocida batalla donde murió el toqui Lautaro y parte de su historia se encuentra aquí mismo, en esta casona.

Siguiendo por sus corredores coloniales, típicos de las casas de campo chilenas, pasamos por sus preciosos jardines, que son un absoluto remanso de tranquilidad.

Y después de todo esto, bajo una agradable sombra, nos vamos a probar sus vinos.

VINOS Y PRODUCTOS LOCALES EN VIÑA KORTA

Mi historia con los vinos de viña Korta es reciente: hace un par de años fui a la fiesta de la vendimia de Curicó, y probé sus vinos por primera vez. Y después busqué mucho, pero no los encontré tan fácil. Así que ir a la viña y a su tienda después, fue la forma perfecta de volver a encontrarme con ellos.

Partimos la degustación de dos de sus vinos, en el patio de esta gran casa de campo, con dos de sus vinos bien conocidos: el Irune, ensamblaje de cepas blancas que se producen también en el valle, y el Petit Verdot, solo, una de sus especialidadaes. ¡Les explico que me gustaron los dos!

En la degustación de vinos también pude conocer productos 100% locales para acompañarlos. Este es otro de los sellos que destaco y que fueron una gran sorpresa para mí al conocer esta viña: no es sólo un lugar donde se produce y exporta vino, sino que tiene una profunda conexión con la tierra y con la comunidad en la que está inserta. Y esto no es para la galería, se nota. Y en una de las cosas que se ve más reflejada, es en cómo también nos cuentan de la historia de los productos para maridar que nos comparten. En este caso, queso fresco y arrollado huaso, que nos ofreen provenientes de la misma zona de Sagrada Familia:

(Nota al margen: no han ido a Curicó si no han probado sus quesos frescos y arrollados. Más abajo, un par de datos para pasar a comer antes de devolverse).

Para reservar tour en viña Korta, puedes hacerlo desde aquí.

De todas formas, si tuviera que elegir qué vino llevarme a una isla desierta y tomarlo para siempre, el que elijo es el Grosse Merille de Korta. Uno de los vinos que más me gusta de todos los que he probado. En la vida. Y este vino lo pueden encontrar en su tienda, que está justo en la carretera, justo volviendo hacia el norte. Ideal para pasar de vuelta.

OTROS DATOS PARA TU VIAJE AL VALLE DE CURICÓ

Para hacer junto con tu visita a viña Korta, te cuento aquí algunas cosas que puedes hacer en Curicó. Aunque en realidad se resumen en una sola: dar una vuelta por su plaza, una de las más bonitas de Chile, sino la más.

Y por supuesto, no sería una visita a Curicó si no vas por un almuerzo como debe ser. Acá te recomiendo dos lugares, uno obvio, el otro no tanto:

• Cecinas Soler, a la salida de Curicó por la Ruta 5 Sur hacia el norte: Muy fácil de encontrar y en extremo famoso, acá puedes venir a almorzar por $6.000 a $8.000. Todos sus sandwiches con sus famosas cecinas -estos sí le hacen honor a la fama- los puedes pedir al plato.
• Como Roble: Un poco más hacia el norte, casi llegqando a Teno, está este sencillo restaurant. Lo recomiendo porque aquí comí uno de los mejores pollos de mi vida. Y eso que como pollo un 50% del tiempo. Comida chilena, abundante y sabrosa.
• Pastelitos: Soy mitad curicana, así que nunca le encontrado mucha gracia a las tortas curicanas. No me gustan! Pero si quieren salir de la curiosidad, aquí en el mapa les dejo un par de lugares para comprarlas.
• Mall de Curicó: Este dato es IMPORTANTE, en el mall de Curicó hay una tienda que vende vinos exclusivamente de las viñas que conforman la ruta del vino de este valle. O sea, los vinos de Korta también los pueden encontrar aquí.

Aquí, en el mapita que les dejo, están todos estos lugares y alguno más, además de la ubicación de la viña Korta.

Cuéntenme en los comentarios si quieren ir!!